martes, 28 de julio de 2009

INMIGRACIÓN (II)

El hombre se desplazó hacia el este y el oeste, norte y sur, volviendo por una parte a África, de donde salió su antecesor, colonizando la zona de Oriente Próximo, Indochina, Japón, Indonesia y resto de Asia, por otro hacia el Oeste hacia Grecia, llegando hasta la Península Ibérica, y hacia el norte, a la zona de Eurasia y Europa Central, llegando posteriormente hasta la zona nórdica.

Tras todas estas grandes migraciones (estamos hablando de un porcentaje muy alto de la población humana mundial), llegaron unos asentamientos y la consiguiente evolución de las culturas debidas principalmente a las condiciones meteorológicas y de entorno, así como los contactos con otros asentamientos.

Hasta aquí podríamos considerar unas migraciones tranquilas o pacíficas en general, pero a partir de aquí, comenzamos con la historia que nos lleva a nuestros días.

A partir de este momento, los pueblos comienzan a moverse principalmente por el agotamiento de recursos, o por el ansia de conseguir otros recursos o unas mayores fuentes de los mismos.

Comenzamos con las épocas de guerras, que si en un principio podían ser tribales, en poco tiempo, a medida que los diferentes clanes hacen estados, y comienzan a descubrir nuevos materiales que se aplican en armamentística, comienzan a haber invasiones, que conllevan dos tipos de migraciones, las del ejercito que invade, que para poseer o explotar la zona conquistada tiene que mandar gente que, primero invada y luego se asiente para legitimizar la invasión, y la de la gente que sintiéndose desposeída de su tierra tiene que irse a otras zonas menos ricas y no pobladas o aliadas, para asentarse allí y seguir viviendo.

Ahora analicemos un país, como por ejemplo España, ya que es el más cercano que tenemos, para ver las migraciones que han existido, y como han surgido.

Partamos de un punto determinado, sin tener en cuenta lo que ocurriera anteriormente, para ver cómo y cuantas pueden haber sido las migraciones de este país:

  • Supongamos que los celtas e iberos son los primeros pobladores. Teniendo en cuenta que guerreaban entre clanes para quitarse recursos, alimentos y mujeres, se obligaban unos a otros a realizar pequeñas (por la distancia) migraciones de pueblos enteros que eran derrotados.
  • Llegan los griegos y fenicios, fundando ciudades para el comercio, y trayendo gente de sus países para controlar los negocios, así como viene gente de dichos países para prosperar económicamente.
  • Llegan los romanos, estos asentándose de forma pacífica donde no existe resistencia, y de forma violenta donde la población se resiste a ser gobernados por Roma. Se crean dos tipos de migración, la de los romanos que se asientan, y, según van derrotando pueblos, los exiliados que huyen para no ser tomados prisioneros y con ello convertirse en esclavos.
  • Llegan los barbaros del norte (alanos, suevos, etc.) que conquistan el territorio romano, siendo el movimiento migratorio ellos en sí mismos.
  • Llegan los árabes, que desplazan a los Visigodos resistentes hasta el norte de España, y ellos se mueven colonizando toda la península, asimilando la población que no se resiste y desplazando la que existe.
  • Los visigodos “reconquistan” la península, expulsando a los árabes, y a la vez migrando de nuevo hacia el sur.
  • Los reyes católicos expulsan a los judíos aduciendo temas religiosos, pero confiscándoles todas sus riquezas.
  • Los reyes católicos expulsan a los musulmanes aduciendo temas religiosos, pero confiscándoles todas sus posesiones.
  • Se descubre América, y comienza una gran migración para conquistarla y consolidar los asentamientos. Tengamos en cuenta que la mayoría de gente que va son gente pobre y sin cultura, en el afán de mejorar económicamente. (Como ejemplo, Pizarro cuidaba cerdos en España y fue virrey en América). Esto también crea un movimiento migratorio en América de la población autóctona que se ve desplazada por los españoles y huyen a otras zonas, creando nuevas tensiones entre distintos pueblos americanos. Esta migración española a América dura siglos.
  • Conquista del norte de África, con las consiguientes migraciones de población española al norte de África, y de la población del norte de África hacia otros países musulmanes.
  • Perdida de las colonias, con el consiguiente regreso de muchos afincados en las mismas de origen español que no abogaban por la independencia.
  • Guerra civil española, los perdedores emigran a América y Europa, principalmente a Francia y Alemania, donde son recluidos en campos de refugiados.
  • Posguerra, época de hambruna en que los españoles tienen que irse a América o Europa principalmente, para poder vivir en condiciones dignas.
  • Años 60 nueva crisis que obliga a muchos españoles a moverse de nuevo hacia América o Europa para poder trabajar y vivir, así como a moverse hacia las grandes ciudades de España (Madrid, Barcelona, Bilbao, Valencia…).
  • Siglos XX y XXI. En un principio viene población subsahariana y marroquí como paso hacia Europa, y cuando, a partir de los años 80 mejora la situación económica y laboral de España para también quedarse, época en la que aparece una migración sudamericana por motivos laborales hacia España.


Como podemos observar, a lo largo de la historia de este país, las migraciones (hacia dentro, hacia fuera o en el interior) han sido, como en cualquier otro país, cotidianas y normales, debidas a una carestía de recursos, y por lo tanto, podrían considerarse tradicionales, y con ello, “legales”.


A partir de este razonamiento, no cabe hablar ya de migraciones “ilegales”, como algunos están empeñados en llamar a las que realizan los pobres que no han tenido suerte en la vida, para diferenciarlas de las de los ricos, tipo deportistas de élite, altos mandatarios, empresarios, diplomáticos y compañía.

El segundo punto que quería tratar, es el que se refiere a la distancia, tanto física como cultural.

fotografías de Sebastian Salgado y de archivo encontradas por Internet.

Por último en esta entrega, os voy a recomendar una recuperación de escritos que leí cuando aun era un niño, una colección para la que tuve que ahorrar 200 pesetas cada 15 días... para comprarme tres libros. La colección completa de las aventuras de Sherlock Holmes, escritas por Sir Arthur Conan Doyle, una obra maestra de la novela policíaca.

Por cierto, os podíais hacer seguidores, que llevo el triste record negativo de 2 seguidores en otros tantos meses... anda, levantarme un poco el ánimo....

Kocham çie.

1 comentario:

  1. Por mi parte considero que te equivocas al no querer aceptar la existencia de una inmigración ilegal, y más aún al hacer demagogia y dividir a los inmigrantes en: pobres y ricos, élite, diplomáticos y compañía. A mi entender eso desacredita y desluce lo expuesto anteriormente.

    Lo primero porque desde el momento que existe una Ley la Costumbre no es aplicable (sólo se aplica en ausencia de Ley). En España tenemos la “Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social”, así como muchas modificaciones posteriores y un reglamento que la desarrollan. Es decir, existen protocolos para la aceptación de extranjeros y cauces administrativos y fiscales, como en todos los países del mundo, y de ello se extrae el concepto de inmigración ilegal. Es necesario, para evitar problemas.

    En segundo lugar, la pobreza también es un problema, pero la división de inmigrantes en ricos y pobres no es tal, ¿dónde se perdió la clase media?, incluso en países africanos existe esa clase media que trabaja en España y que exporta divisas a sus países de origen, viven aquí y traen a sus familiares cumpliendo como cualquier español, y qué decir de los sudamericanos y habitantes de toda Europa que viven y trabajan aquí.

    Otra cosa es que queramos ayudar a los más pobres, a los explotados, a los atormentados, a los chantajeados por las mafias, a los más necesitados. Pero para ello no es necesario arremeter contra los que precisamente tienen el dinero para invertir: los ricos (Bill Gates mayor inversor del mundo en ayudas a los más necesitados), los deportistas de élite (que ayudan con fundaciones personales a la integración social), diplomáticos y mandatarios y compañía, entre los que hay tiburones sí, pero que apuntan poco a poco, con retrocesos y errores, a un mundo mejor. ¿Dónde quedó el optimismo?

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